¿ Reloj Cuarzo o Automático ?

¿Cuarzo o automático?

Qué nos llama más?

Una breve exposición a continuación:

Coste:

En la mayoría de los casos los relojes de cuarzo son algo más económicos que los relojes automáticos. El precio de los relojes de cuarzo es de sobre 15 euros para arriba. Los relojes automáticos son más costosos, pero por norma general también cuentan con mecanismos de mayor calidad.

Precisión de marcha:

En cuanto a este tema, hemos de decir que en los relojes de cuarzo se registra una desviación mínima. Los relojes automáticos en cambio no logran esta precisión. Lo que es muy importante es el cómo y el dónde se guardan los relojes. No es casualidad que existan las cajas rotor para relojes automáticos.

Vida útil:

En lo que se refiere al trajín del día a día, los relojes de cuarzo podemos decir que cuentan con una ligera ventaja sobre los relojes automáticos. Los relojes automáticos son más delicados ya que sus mecanismos son el resultado de un minucioso y arduo trabajo de ajustes, cosa que no ocurre en los relojes de cuarzo. Dado que los relojes de cuarzo funcionan de manera digital, es decir que no se encuentran piezas de funcionamiento mecánico en los mismos, no dan prácticamente pegas. Los relojes mecánicos sin embargo ya son otra historia…

Elegancia:

Ahora es cuando el tema se vuelve subjetivo. Los relojes de cuarzo pueden resultar elegante, ahora bien, los relojes automáticos les llevan ventaja en este ámbito. Los relojes automáticos son capaces de deslumbrar gracias a la complejidad y el refinamiento de sus mecanismos. A nuestro parecer, el absoluta ganador aquí.

Mantenimiento:

Las pilas de los relojes de cuarzo dura de media unos dos años. El gasto, por tanto, es asumible, unos cuatro euros cuesta una pila por norma general. En el caso de los relojes automáticos, podemos prescindir completamente de una pila, dado que el mismo movimiento de la muñeca genera normalmente el impulso necesario para mantener el reloj funcionando.

Gastos de reparación:

También en este aspecto se sitúan los relojes automáticos en cabeza. El precio de compra de los relojes de pulsera automáticos es más elevado pero en el caso de tener que repararlos, merece la pena en la mayoría de los casos. En el caso de los relojes de cuarzo, el coste de la reparación en muchas ocasiones supera el propio precio de compra del reloj.

¿Cómo funcionan?

Los relojes de cuarzo se sirven de unos cristales de cuarzo fabricados de manera artificial en lugar de utilizar un movimiento mecánico. Los cristales vibran gracias a la electricidad que genera la pila. Las vibraciones son transmitidas al motor del reloj quien se encarga de que las agujas se muevan al ritmo correcto. La desviación de marcha en los relojes de cuarzo se sitúa de media en 0,02 segundos al mes.

Los relojes automáticos funcionan a través de muelles. El ritmo, al contrario que en los relojes de cuarzo, se genera a través de una mecánica complejo y no a través de cristales. La desviación de marcha de un reloj automático depende siempre del tipo de mecánica que lleva pero sin duda, es casi siempre mayor que la que presentan los relojes de cuarzo.

Y para finalizar:

Como siempre: Para gustos están los colores. Los relojes de cuarzo suelen utilizarse más a diario. En cambio, los relojes automáticos son objetos de gran prestigio que cada vez encuentran más adeptos. A diferencia de los relojes de cuarzo convencionales, los relojes automáticos a menudo se entienden como una inversión.

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